De la tierra a Dorania (LIBRE)

He vivido en la tierra desde que nací. Provengo un Breezek, una ciudad secreta de hechiceros en la tierra. Nadie conoce su existencia, solo nuestra especie. No encontraba a la maldita Samantha Benson por ningún lado. Esa chica desde que la vi por última vez en el bosque que había desaparecido. No sabía donde estaba, temía por su vida ya que esa chica me gustaba mucho.

En fin, me hallaba jugando al escondite con mi hermana Elizabeth y huíamos de mi hermano Justin para escondernos. Llegamos a unas cuevas, vimos el vórtice y lo atravesamos. Luego no sé que pasó. Había llegado con mi hermana hasta un extraño lugar, una especie de bosque encantado y luego me había separado de ella. No la encontraba y comencé a mirar a asustado de un lugar a otro.

La miré extrañado. - ¿Qué te preocupa? - le pregunté mirándola -.

- Oh, entonces esa espada tenemos que recuperarla. - le dije preocupado -. Pero no sé cómo. De todos modos pienso proteger a Isabella. Ella es importante para mi.

Escuché a Corinne y luego a Elizabeth. - Jasparth es un señor oscuro. - le respondí -. Lleva amenazando los reinos desde hace poco y la verdad, por culpa de Jasparth, la princesa Isabella corre peligro. No pienso dejarla sola, la protegeré cueste lo que cueste.

- Bueno, pero antes debes saber luchar. - le dije mirándola -. ¿O ya sabes manejar armas? Ya sabes, espadas o arcos.

Escuché a Corinne y asentí. - Yo te ayudaré, portando la espada Thorzal no puedo perder. - le dije mirándola -. Es una espada de ganadores, con ella mi padre derrotó a Jasparth. Aunque en realidad hay un Señor aún más oscuro que Jasparth. Su nombre es Gudrov y creó un anillo para dominarlos a todos.

Miré a Elizabeth extrañado. - ¿Qué es eso? Nunca oí hablar de El Señor de los Anillos. Son cosas de la tierra. - le dije confuso -.

- Extrañada ¿no? Yo es la primera vez que lo oigo. - le dije divertido a Corinne -. Según los libros de historia, Gudrov forjó varios anillos pero creó uno para dominarlos a todos. Fue muy temido en Dorania hasta que mi abuelo, el Príncipe Septimus I Waldorf, lo derrotó. Pero éste murió, ya que el anillo lo llevó hasta la muerte. Lo traicionó. Aunque dejó un heredero, mi padre dice que soy yo.

- Aquí hay una comarca. - le informé sonriendo y luego observé que escribía algo -. Oye, Beth ¿Qué escribes? - le pregunté divertido -.

- Wouh, eso estaría genial. Salir en una historia. - le dije sonriente -. Podrías escribir sobre tus vivencias en Dorania y que yo saliera también en esa historia. Me gustaría llegar a ser un héroe reconocido en los reinos. Cómo mi abuelo y cómo mi padre.

- Espera, Corinne. - le dije -. ¿De que leyenda hablas? - le pregunté algo perdido -. Explícamela mejor que no la antendí. - le pedí -.

Hay una leyenda desde los reinos, pero todos los reyes no les contaron porque le pensaba que era fantasia pero mis padres siempre creyeron la leyenda-dije pensando-Los tres magos sabios vivian en una época donde todo habia tortura,puro oscuridad y los buenos los temian-dije-Hasta que un dia el viejo sabio Montes creo con todas sus fuerzas una espada, una espada que era de dianmantes, era hermosa lo llamaban la espada de cristal,esa espada era la más poderosa de todos los tiempo y con ella, destruyo los males, gracias a esa espada existio la luz-dije sonriendo-Mi familia a contado esa historia por varias generaciones pero no sé porque-le dije-